📜El mercado del Born, la Ribera, actualmente BCC (El Born, Centro cultural), se crea en 1873 y se abre al público en 1876. Hoy en día, este fabuloso edificio modernista de materiales industriales como cristal y hierro, se trata además de un centro de exposiciones. Un ejemplo de hermosa arquitectura que disfruta hoy de una nueva función, al tratarse de uno de los museos arqueológico de Barcelona. Acoge en su interior las ruinas del barrio medieval de la Ribera, el barrio demolido para la creación de la Ciudadella de Felipe V, actualmente sitio de recreo de Barcelona, cuya función distaba de la de parque histórico, siendo de índole militar.
📜En 2002, durante las obras para trasladar la biblioteca provincial, son descubiertos los restos arqueológicos de barrio medieval en perfecto estado de conservación, mostrando la evolución del barrio desde el s. XIV, hasta su destrucción 1714. Por ello, el edificio pasó a considerarse de interés cultural. Se iniciaron las labores de reconstrucción de la zona y se realizó la inauguración el 11 de septiembre de 2013, en conmemoración a la caída de la ciudad ante las tropas borbónicas de Felipe V, bajo el mando del duque de Berwick durante la Guerra de Sucesión Española (11 de septiembrede 1714).
📜En el interior del mercado, es posible disfrutar de notables datos acerca de la historia y tradición del antiguo barrio, un lugar de notable esplendor de los s. XIII al XV, sus costumbres y disposición de sus calles. La Ribera se trataba de un lugar de especial relevancia económica en cuanto a la venta, incluso es visible a día de hoy al contemplarlas villas, palacios y casonas de los mercaderes adinerados. Sólo es necesario pasear por el Carrer Montcada, tocando la famosa Iglesia del Mar, para ver ejemplos como el Palau Dalmases, o el museo Picasso.
📜Además en el centro cultural es posible hacerse una idea del panorama costumbrista en la época. Sus oficios y gustos. Puede resultar sorprendente que ya disfrutasen de granizados y zonas de venta de hielo, por ejemplo. No obstante no es lo único, sino que además, este bien de interés cultural, está dotado hoy en día de un cartel de múltiples actividades, un ambiente de lo más novedoso. No faltan ferias, galerías, exposiciones, pasarelas de moda y otros espectáculos que llenan de vida y ambiente aún más especial al lugar, si cabe.
🍳Es incluso un buen punto de relevancia gastronómica, al albergar en su interior, el restaurante 300, en honor a la batalla y a la historia acoge el recinto. Aparece de la mano de la casa de cervezas barcelonina Moritz, y del chef Jordi Vilá. Cuenta con amplio surtido de tapas y platos de la cocina histórica tradicional catalana, con un punto de originalidad en sus creaciones.
🍳El maridaje con la fabulosa 1714, variedad de cerveza especial sujeta a la receta tradicional de la época, es algo que se debe de probar. Un lugar en mi opinión fantástico. Cabe aplaudir la sobresaliente labor de Moritz, para la recuperación de espacios y locales de interés histórico de Barcelona, ya sea su antigua fábrica, zonas como el Velódromo, Palo Alto Market, o los eventos realizados en la antigua fábrica Lehmann.
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