No existen victimas en el universo, somos responsables y dignos de transcender nuestros contextos. Hoy hablamos de empoderamiento y responsabilidad en esta reflexión. ¿Qué son nuestros contextos? Nuestros contextos son aquellas proyecciones en las que nos vemos inmersos. Nuestro universo. Nuestro aparente alrededor, aquello que parece ocurrir fuera.
¿De qué dependen? Podríamos decir que tenemos tres inconscientes, un inconsciente colectivo, un inconsciente del clan o familiar y un inconsciente individual. Cada uno se une en ti, en tus memorias a trascender, integrarla y traspasar. Eso que hacer consciente para que deje de condicionarte. Esas piezas de puzle se componen de tus convicciones y patrones de funcionamiento, son útiles te han llevado al punto en el que estás porque funcionan en un 95%en modo automático. Ahora bien, ¿cuanto te están condicionando?
¿Cuánto es el mundo tal y como crees que es?
No vemos el mundo como es, vemos sólo nuestra interpretación del mundo. Vemos el mundo como somos. Siempre estás ante ti mismo interactuando. La relación con todo es tu perfecto maestro sobre ti mismo. Los contextos son esos aprendizajes precisos para ti. El mundo que ves es el mundo que proyectas. Es tu idea de cómo ha de ser/es el mundo la que sostiene ese mundo. En cualquier momento puedes preguntarte si quieres tener razón o te apetece probar nuevas oportunidades más allá de tu punto de vista o creencia de las cosas.
El autocuestionarse las aparentes convicciones y el reírse de uno mismo es muestra de una relación sana y saludable con el experimentadoe de la experiencia. Esto es, ir más allá de los hábitos de la personalidad para dejarte ser tú, en ti, flexible y coherente con cada momento en tu vida. Sin expectativas. Sin nada que hacer ni conseguir más allá que aquello que se decidas, alineando lo que sientes de corazón, dices, piensas y haces. ¿Te das cuenta de la libertad que es dejarte ser tú? Mantener la sombra oculta o no dejarte ser quién eres en sombra consume muchísima energía.
Parece complejo y en realidad es el permiso que siempre has esperado para hacer lo que necesitas. Este proceso, al liberarnos de cargas y patrones que consumen constantemente energía y generan impactos y estrés a nivel crónico, nos vigoriza. ¿Y si te digo que ese permiso es tu derecho de nacimiento y es el mejor bien que puedes hacer por la humanidad? Déjate ser tú, no hay mayor revolución, de dejarte expresar lq sientes surge la verdadera coherencia y alegría.
Estás a una decisión de dejar de sufrir, es tu responsabilidad
El sufrimiento dejará de tener sentido el día que decidas dejar de sostener la idea de que es necesario y dejes de validarlo. Es decir, el día que dejes de ver que hay algún beneficio en un mundo de sufrimiento ¿Quién podría querer un mundo de sufrimiento? El inconsciente sentimiento de culpa te llevará hipnotizado a verte en el espejo de la vida en situaciones de conflicto y culpabilidad. Tu inconsciente decide hasta 10 segundos antes por ti que tú mismo y es el 95%de lo que eres. El neurólogo y psicólogo Benjamin Libet, pionero en su tiempo en el estudio de la psique y la consciencia lo demostró. ¿Despertamos?
¿Quién crees que gana si no lo comprendes y pretendes ir por la fuerza bruta? ¿Un mísero 5%?o¿ el 95 programado?
Puedes aceptarlo o no, ambas son de decisiones lícitas y no juzgables. Cada decisión de este instante condiciona al siguiente. De nuevo decisión y responsabilidad dirigen el tema. Según ellas experimentarás unas u otras realidades en tu vida. No despertar nos lleva a seguir repitiendo una y otra vez la lección no aprendida.
Repetimos curso y lo llamamos destino, estar estrellados o ¿por qué siempre a mi? ¿Por qué siempre me pasa lo mismo? La cuestión es que, si llevas los dientes pintados de negro y lo ves en distintos espejos (eventos, personas o circunstancias) y lo rechazas en lugar de darte cuenta, ser consciente y limpiarlo… los dientes seguirán negros y el espejo seguirá reflejando lo mismo.
¿Por qué nos cuesta tanto esa responsabilidad de limpiar los dientes?
Los sentimientos negativos son una fuente de adicción importante. Es una droga muy potetene que genera más sentimientos negativos y más bioquímicos y neuroquimicoa estresantes y lesivos para el cuerpo. Imagínate que hay una máquina a automática que da martillazos y tú, anecdoticamente pones tu cabeza debajo. La máquina de los martillazos es Inocente de dar martillazos. Esta programada para ello. o tenemos que cambar la máquina sino nuestra decisión. La máquina no sabe hacerlo mejor. La persona que está debajo, al contrario, sí puede elegir salir de ahí. Es posible comprender que todo es un programa mental de adiciones o, utilizar la adicción del Programa mental para justificar su inmovilidad
Si yo no estoy programada y me doy cuenta que no quiero esa situación ¿por qué no salgo de ella? si yo estoy bajo ese martillo sin ás cadenas que mis decisiones, yo soy la persona que decide estar. Soy la única capacitada para tomar decisiones distintas. Ser honesta con lo que se siente no es quejarse. Una persona es libre de decir me siento mal, estoy harta, es positivo y liberador. Es honesto. Pero si dice, estoy mal porque tengo fiebre y decide seguir sufriendo la fiebre sin tomar el ibuprofeno, u medicamento o poner solición entonces la cosa cambia. La honestidad pasa a ser regodearse en el programa.
Ser honesto con tu sentir te libera, regodearte en tu percepción como víctima te condena a una muerte en vida
Una persona puede aceptar que es su decísion y decir, me duele pq he decidido que me iba a doler, con lo cual no sufre porque sabe que está cumpliendo su propia voluntad. No es lo mismo saber que estoy así por decisión y voluntad que por resignación e impotencia. (responsabilidad vs vívtima). Esa persona podría observar sus actos y pedir ayuda, o tomar otro tipo de decisión, podría hacer otra cosa.
Un asunto que suelo comentar en consulta es el siguinte: podemos comentar y explicar todo lo que quieras, podemos encontrar las causas, pero, tomar consciencia e por qué hago las cosas nos lleva a tomar acción y decisión sobre ellas. No cambiar las decisiones que te hacen estar en un punto o la percepción de ellas te hará seguir en la inmovilidad. Nadie más que tú puede decidir por ti. Ninguna explicación, terapia, persona, terapeuta, yogui o gurú. Cuando un cliente no quiere sanar su percepción, con todo el amor del mundo le explico que cómo vivir su vida y en qué estado, es sólo su decisión. Esa decisión, evidentemente lleva unas consecuencias.
Nadie está retenido más que por su jaula mental. Decidir no poner solución, decicir no decidir y quedarse inmovil es lícicto, pero o asumir que es porque Yo lo decido, es la causa del sufrimiento. Soy yo la que toma la responsabilidad de asumir o no asumir ser causa de mi vida y su percepción. Cuando una persona no es adicta a la parálisis y a los programas ni se piensa estar bajo la maquina de martillazos. Cuando la desvalorización y el conflicto interior está dentro de uno, entonces es cuando afloran esos sentimientos. Curiosamente, en muchas ocasiones cuando decides salir de la máquina de martillazos y te alejas, sueles observar que era una máquina ilusoria fruto de un juego mental.
Si me creo mis pensamientos y pesadillas un rato manifiesto los efectos neuroquímicos de los mismos
Cada efecto genera más y más pensamietos asocieados y más y más efectos asociados, por lo que puede que parezcan más reales. Si los mantengo en el tiempo, he creído del todo que son reales y los sigo sosteniendo creando y fortaleciendo más los programas y condicionamientos. A mis clientes siempre les digo: si algo me saca de mi paz mental estoy en conflicto, no tomamos decisiones drogados. Decidimos otra cosa y empezamos de nuevo
No huimos. El escape, la respresión y la supresión son mecanismos inconscientes que agraban el problema. Somos conscientes de que nosotros somos causa y solución. La decisión de poder soltar esa idea, ese pensamiento. Podemos decidir otra cosa. No es lo externo lo que nos salva, es nuestra decisión, para llevarla a cabo podemos usar herramientas. Observamos que estams drogados por estos pensamietos, lo reconocemos y, conscientemente decidimos volver a nuestro centro. La decisión de volver a nuestra paz mental es un acto de voluntad interna.
No es lo mismo saber que una peli de terror es ficción mental que creersela. No nos creamos los pensamientos de miedo
Cuando suelto el conflicto aparece la solución. No buscamos soluciones con una mente drogada y entrenada para ver problemas. Sólo tomamos decisiones con una mente clara y serena. No juzgo lo que siento, está ahí para hacerme consciente de su presencia. Ahora ya lo sé y pedo solucionarlo. Si sé que puedo limpiarlo ya puedo estar en calma. No resisto lo que siento, lo observo y si veo que aparentar poder conmigo y sobrepasarme, respiro. Decido hacer algo que me ayude a liberar mi carga y soltar esos pensamietos sabiendo que no son reales. No es lo mismo ver una película o dar un paseo por evasion y huida, que para relajar la presión. Podemos escribir, realizar alguna actividad, respirar, pasear, charlar, cualquier cosa que por decisión nos sirva de herramieta para salir del circulo vicioso. SI me decido a soltar la adicción a esos pensamientos buscaré nuevas razones que confirmen que no vale la pena estar debajo del mono de los martillazos. Gracias por tu tiempo
2 comentarios en “Responsabilidad de recibir martillazos”
Cada día admiro más tu trabajo y profesionalidad. Muchas gracias! Como siempre pura luz y sabiduría
Gracias siempre mi preciosa luz, os animo a todos los que leais crealidadescom a que conozcáis a esta maravillosa life coach emocional (wwww.insiddcarmen.com) y su otro proyecto cultura emocional